Sinopsis:
Una emocionante novela sobre la fuerza del primer amor y sus espejismos.
Durante su juventud, Gabriel Aristu y Adriana Zuber protagonizaron una apasionada historia de amor que parecía destinada a durar para siempre. El futuro, sin embargo, tenía otros planes para ellos. Separados durante cincuenta años por un océano de incomunicación, ella atrapada en la España de la dictadura, él viviendo el éxito profesional en Estados Unidos, vuelven a encontrarse en el ocaso de sus días. Miradas, caricias, deseos acallados y viejos reproches dejarán paso entonces a la constatación de que la nostalgia de aquel primer amor lo es también de la persona que una vez fuimos.
No te veré morir es una novela sobre el poder de la memoria y del olvido, la lealtad y la traición, los estragos del tiempo y la obstinación del amor y sus espejismos. La conmovedora historia de una pasión frustrada por la vida y un hermoso retrato de la vejez escritos con una delicadeza extrema.
Nuestra opinión sobre No te veré morir:
Lo primero que sacude al lector es el estilo con el que da comienzo la narración: sin diálogos, ni puntos, ni capítulos…Un torrente de palabras perfectamente encadenadas en frases inacabables. A medida que se avanza en la lectura, uno siente como si se sumergiera en un relato espeso pero cautivador, por su calidad y la riqueza de las emociones que expresa, por su profundidad y su belleza. No es una lectura fácil pero sí que merece la pena.
Detrás de la historia de amor y separación de Gabriel y Adriana, el autor desgrana la realidad de dos escenarios bien diferentes: España y Estados Unidos. Las dos caras opuestas de una época de cambios que determinarán el futuro de los protagonistas. Temas como el exilio, la nostalgia, la represión, la renuncia a las ilusiones, están muy presentes en la trama.
Duras palabras son las que utiliza el autor para contar cómo se vivía en la España de la posguerra. Describe la supuesta “paz” posterior a la guerra civil como “un matadero industrial que ocupaba todo el país y estaba en funcionamiento día y noche, una macabra burocracia de la persecución y el exterminio bendecida además por las autoridades eclesiásticas…”.
Expone también la manera cómo vivía un exiliado español su llegada a la deslumbrante América de las oportunidades, tan distinta a la España oscura y atrasada que dejaba atrás. Un choque cultural difícil de dirigir, al que el protagonista logra adaptarse pero sin que llegue a superar la diferencia con el mundo del que proviene. Una de ellas es, por ejemplo que “en California el pasado no existe”, se vive permanentemente en el presente y se sueña el futuro.
En una entrevista concedida a Editorial Planeta, el autor explica el porqué de una de las sorpresas que nos depara la novela: el particular estilo que utiliza en la redacción, y también que representa para él alguno de los elementos que aparecen en el relato, como la música de Bach y su interpretación por el inigualable Pau Casals.
Sobre Antonio Muñoz Molina:
Nace el 10 de enero de 1956 en Úbeda (Jaén). Creció en una familia modesta y mostró interés por la literatura ya desde muy joven. Estudió Periodismo en la Universidad de Madrid, pero pronto abandonó para dedicarse por completo a la escritura y a la lectura.
Su carrera literaria despegó con la publicación de su primera novela, Beatus ille (1986), que le valió el reconocimiento y elogios de la crítica. Posteriormente, con El invierno en Lisboa (1987) consolidó su posición como uno de los escritores más prometedores de su generación.
A lo largo de su carrera, Muñoz Molina ha explorado diversos géneros literarios, desde la novela hasta el ensayo, mostrando una versatilidad notable en su escritura. Su obra aborda temas como la memoria histórica, la identidad, la política y la cultura, y a menudo se desarrolla en contextos históricos o sociales complejos.
En 1995, fue elegido miembro de la Real Academia Española (RAE), y en 2018 asumió la presidencia de esta institución, cargo que ocupó hasta 2020.
Su compromiso con la lengua española y su contribución al mundo literario le han valido diversos premios:
- Premio Princesa de Asturias de las Letras 2013
- Premio Quijote de las Letras Españolas 2005
- Premio Nacional de Narrativa de España 1992
- Premio Planeta de Novela 1991
- Premio Nacional de Narrativa de España 1988
- Premio de la Crítica de Narrativa Castellana 1987
Además de su labor como escritor, Muñoz Molina ha colaborado con varios medios de comunicación y ha participado activamente en el ámbito cultural y educativo.
Otras obras de Antonio Muñoz Molina:
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